miércoles, 24 de febrero de 2010

mi tiempo

Cada segundo cuenta. Es irrepetible, no volverá, y nos acerca un poco más al final. No es algo negativo, muy al contrario. Te hace valorar tu tiempo más que cualquier otra cosa... hace que quieras convertir cada momento en algo especial. A veces siento que no lo aprovecho como debería, que el tiempo pasa mientras yo no hago nada por intentar llenarlo de algo que no sean obligaciones, preocupaciones, cansancio y ganas de dejar de hacer lo que estoy haciendo.
Es por eso que me desespera estar en un trabajo que me hace infeliz, porque siento que me están robando tiempo, lo más valioso que tengo, que estoy desperdiciando momentos preciosos, y que encima, me agota y me pone mal humor para desaprovechar también los momentos que tengo para hacer lo que quiero.

jueves, 4 de febrero de 2010

orgullo

1. m. Arrogancia, vanidad, exceso de estimación propia, que a veces es disimulable por nacer de causas nobles y virtuosas.

Cuando estás ahí fuera, en el mundo real, encuentras a mucha gente que, por egoísmo o por maldad, actúa en contra de tus intereses... Pienso que en estas situaciones, el orgullo es muy útil para defender lo que es tuyo, para no ceder ni un centímetro, para evitar daños mayores. Es como una especie de escudo en la guerra contra los enemigos.

Por ello, cada vez me parece más absurdo sacar el orgullo y actuar de manera defensiva con la gente que te quiere y a la que quieres, los que están en tu bando. Se supone que no tienes que usar escudos con esos compañeros con los que has elegido compartir tu vida de una u otra manera, porque perseguís un objetivo común: la felicidad mutua.

Debería ser así de fácil: tú me quieres y quieres que yo esté bien, así que si dices o haces algo que me pueda molestar, he de pensar primero que no lo has hecho queriendo... ¡¡Qué pena que antes de esta reflexión, en muchas ocasiones salga primero el orgullo!!