sábado, 2 de febrero de 2008

descubrimientos

Da igual lo que haya pasado, da igual el tiempo que haya transcurrido, pero lo cierto es que si alguna vez sentí afecto por alguien, lo sentiré siempre de una u otra manera. Y puede que yo confunda ese afecto aletargado con indiferencia o con aversión, pero no es cierto, yo sé que no lo es. Quizás el amor es como la materia, que aunque sí se crea, no se destruye, sólo se transforma. Y por cada persona que quise y ya no está, hay un pequeño jirón en mi corazón, una mezcla de añoranza y pena que varía en intensidad.


6 comentarios:

chonti dijo...

Qué bonito! Es tuyo? Me va a hacer llorar más que cualquier capítulo de Wantri!!

Gran descubrimiento, lo has clavado.

Nus vemos.

cutrecina dijo...

No sabes cómo te comprendo. Es totalmente cierto eso de que la añoranza vive disfrazada de indiferencia o ira. Supongo que todos hemos pasado por esto en mayor o menor medida y duele. Por mucho tiempo que pase, ya sean cinco meses o cinco años, el cariño sigue latente en el fondo de nuestros corazones.

Un beso bien grande :)

Anónimo dijo...

Todos aquellos que pasan por tu vida, aquellos que te hacen daño y te hacer ser feliz son pequeñas burbujas que se forman en el corazon. Comprendo las palabras que has escrito, y aunque, tal vez, no sea la persona mas adecuada, te muestro mi sincero respeto por ese descubrimiento. No solo tu lo sientes, todos los sentimos, lo mismo o parecido, pero no todos saben darse cuenta de lo que significa.

Saludos guapa

Anónimo dijo...

Todo, absolutamente todo, deja una huella en el corazón. Debe ser eso por lo que es el órgano más poderoso y más debil.

Pero también es cierto que todo, ya sea bueno o malo, nos aporta puntos de vista y experiencia

Anónimo dijo...

Me gustó lo del amor y la materia =)

Ad

Anónimo dijo...

¿Cómo que la materia sí se crea, pero no se destruye?

Qué desastre. Debes ser de letras. ¿No has conocido nunca a nadie de ciencias que te haya dado el coñazo con estas cosas? --> ay, qué irónico que soy XD

La materia se crea y también se destruye. Se crea de la nada, según el principio de incertidumbre de Heisenberg. Lee sobre la radiación de Hawking.

Se crea de la nada y también es capaz de volver a ser nada, como si nunca hubiera existido.

En cierta forma, los sentimientos también. O no, no sé...

No creo que lo sepamos nunca.