qué bonito es todo en irlanda

Dos meses y pico después de volver de Irlanda, me decido a escribir sobre ella. No iba con ninguna expectativa en particular, simplemente aprender inglés y soltarme un poco, pero me volví llevándome mucho más de lo que esperaba.

Es un país que no llama mucho la atención, cualquier persona que no la haya visto te podría decir como máximo dos o tres cosas sobre Irlanda. Pero es un país tan bonito, que me impresionó. Es lo que siempre digo: en Irlanda, todo es bonito.

Cualquier paisaje es digno de ver y fotografiar, puesto que absolutamente todo está plagado de verde, aunque sea agosto, y eso choca a alguien que vive en un país que desde el avión se ve amarillo.

Y no sólo eso, sino que las ciudades también son preciosas. En Dublín no hay edificios de más de 3 o 4 plantas, y casi todos los irlandeses, sean o no de Dublín, viven en casitas bajas o chalets, y ¿adivinad qué? todas las casas son bonitas. Y las iglesias... hay miles, pero todas todas son bonitas, en todo el tiempo que estuve allí, no vi ni una que fuera fea, aunque fueran nuevas (no son mazacotes de cemento como hacen aquí :S).

Y la gente... el caracter de los irlandeses es muy amistoso, eso lo dicen siempre y es cierto, pero también es muy cívico. Me impresionó que no hubiera detectores anti-robo en las puertas de la tiendas, que no te pidieran el carné de estudiante cuando había precios reducidos si la enseñabas (con decirlo, valía), y cómo la gente no destrozaba lo que había a su paso, simplemente por diversión o porque podían hacerlo. En el Starbucks te ponían tazas de cerámica como las que venden, porque confiaban en que no iban a ir españoles a robarlas (aunque iban y lo hacían, claro).

¡Irlanda en el corazón y Glasnevin Forever!